ROSA DÍEZ SE QUEDA SOLA CON SU MANO DE HIERRO

Fernando Maura y Rosa Díez, en una imagen de archivo

UPyD expulsa a dos de sus cuatro eurodiputados por su “rebeldía”

Fernando Maura y Enrique Calvet tenían abierto un expediente y estaban suspendidos.

Fernando Maura y Enrique Calvet, los dos eurodiputados de UPyD a los que la formación había abierto expediente y suspendido cautelarmente de militancia, han sido expulsados hoy “por su constante y público desprestigio del partido (…) y abierta rebeldía”. La formación de Rosa Díez pierde así a la mitad de los cuatro miembros de su delegación en Bruselas y ahonda una crisis que ha incluido la dimisión de Toni Cantó (diputado y candidato a la Generalitat valenciana) y el pase a Ciudadanos de dos de sus cargos electos (Ignacio Prendes, diputado por Asturias; y Alberto Reyero, por Madrid), además de cientos de militantes.

Maura, que había defendido públicamente la fusión de UPyD con el partido de Albert Rivera, ha anunciado esta mañana la formación de una nueva delegación europea, llamada Ciudadanos Europeos, que formará junto a Javier Nart y Juan Carlos Girauta, los dos eurodiputados de Ciudadanos. “Seguiré defendiendo el programa electoral por el que fui elegido”, ha dicho el eurodiputado, que aún no ha recibido notificación alguna de su expulsión, según ha podido saber EL PAÍS.

Calvet, por su parte, ya había anunciado su voluntad de trabajar fuera del grupo europeo de UPyD por sus desencuentros con Maite Pagaza, la jefa de la delegación y nuevo miembro del Consejo de dirección nacional, todo un símbolo de su sintonía con Rosa Díez. Ninguno de los expulsados vio con buenos ojos que se filtraran sus gastos en comidas, que ascendieron a miles de euros, o que su suspensión cautelar se le filtrara a la prensa la noche de un Viernes Santo, sin que ellos la conocieran. Son dos señales de que el pulso entre los dos bandos ha sido encarnizado. La última ha llegado esta mañana. Cuando Maura se aprestaba a comunicar su marcha, UPyD se ha adelantado y ha hecho pública su expulsión.

“Se acuerda su expulsión (…) por actos de propaganda a favor de las tesis de otro partido político”, reza la explicación de UPyD, que no menciona en ningún momento a Ciudadanos. Maura, según pudo saber EL PAÍS, no ha hecho alegaciones durante el procedimiento y tampoco recogió el escrito que incoaba su expulsión. Su marcha y la de Calvet, que siempre defendió su continuidad en el proyecto de UPyD, e incluso impulsó una corriente interna para su regeneración, negando en todo momento su voluntad de marcharse a Ciudadanos, mantiene viva la crisis de la formación de Rosa Díez.

"Sopesaré si optar por la vía  judicial ordinaria para plantar cara a esta resolución que considero injusta y no fundamentada", ha dicho Calvet en un comunicado.

UPyD, que no logró ningún diputado en las elecciones andaluzas del 22-M, acude a las municipales y autonómicas del 24 de mayo sabiendo que se juega su supervivencia. No hay apenas dinero en la caja, por lo que solo contará con 100.000 euros de presupuesto. Algunas de las caras más conocidas del partido y con mayor atractivo para los electores ya no forman en sus filas. Con las generales también en el horizonte, la formación parece vivir un 2015 a todo o nada.

EL PARIDO SE HA CONVERTIDO EN EL HUERTO PARTICULAR DE ROSA DIÉZ SE AVECINA UN DESASTRE ELECCTORAL.